18 de julio de 2025

Reencarnación

La última vez que percibí una señal fue en forma de excremento. Un día recogiendo la caca de B. en la calle se rompió la bolsa y su deposición se puso en contacto con mi mano. Instantáneamente, como imitando un gesto propio de las artes marciales, mi mano se transformó en ¿una grulla? ¿un armadillo en posición de ataque? Al día siguiente un pájaro me eligió como destinatario de sus líquidos excrementos. Ahí fue donde la señal empezó a tomar forma. Pensé que debía esperar una tercera, pero el mesías nunca llegó.

Hay una  cucaracha --lo normal es que sean distintas ya que las dos están, hasta donde llego, muertas, pero a mí me parecen reencarnaciones de la primera-- que aparece entrada la noche por el desagüe de la ducha. La primera vez trepaba por la mampara del cubículo cuando encendí la luz. Aquí no estaba acostumbrado a cucarachas rojas-rápidas e impredecibles, solo a unos escarabajos negros-lentos y y ensimismados que me cruzaba descuidado en la calle. La segunda me pilló inmerso en mi lectura. Debo decir que parecía interesada en lo que andaba leyendo pero me quedé helado, en shock, poseído por mi pánico irracional. Ahora tapo el sumidero con un pequeño barreño que coloco bajo un bote de gel de ducha y es cada mañana cuando me estreso por qué habrá debajo del cuenco.

Hablábamos ayer en pilates y P. había tenido una semana horrible que incluía la muerte de su perrita. Lo llevaba como podía pero algo le ocurrió después. Una paloma decidió criar dos huevos en un macetero grande en la terraza, uno que apenas se puede arrastrar. J. habló de lo primero que le vino a la mente: una reencarnación. Yo estaba convencido de que es una señal. No sé interpretarla pero desde luego merece una escucha atenta. Por lo visto tardan cerca de cuatro semanas en romper el cascarón, o eso dijo P. que había visto en internet. 

17 de julio de 2025

Siempre hambrientos de tu carne

Pensaba en el disco de Jesucrista Superstar, me ha robado la idea de vestirme de Jesucristo para mi 33 cumpleaños. Que sea un disco audible de 'pe a pa' es algo muy bueno en tiempos de listas de reproducción curated by una inteli gencia art ificial. Es una especie de álbum homenaje a distintos estilos e influencias, y sobre esto habrá un montón de reseñas especializadas al respecto. Ofrece una crítica a su sección de la sociedad, la sociedad instagrámica basada en la imagen, es divertida, cínica y no deja mal sabor de boca. Paradójicamente se podían ver trillones de pantallas de móvil encendidas grabando fragmentos en los momentos clave, demostrando que nada ha cambiado. Al mismo tiempo creo que las vibraciones de sus canciones instan a reírse, a querer cambiar, aceptándote cómo eres. Echo de menos ese tipo de crítica que en lugar de deprimirte, te llena de energía. Está claro que la era de la autoayuda positiva y vacía me da nauseas, pero hay un amplio espectro de crítica que no es pasivo-agresiva ni oscura.
 

Anoche había una masa flipando en colores con, más que un concierto, con un show. Se desplegó un código de moral, unas tablas de la ley con mucha autoconsciencia, una manera de ver las cosas.  No estoy intelectualizando la cultura pop. La única imagen que no me puedo quitar de la cabeza era un joven adolescente con cascos protectores emocionado, saltando detrás de las butacas junto a su madre, que era su mayor fan.

10 de julio de 2025

Acostumbrarse al desastre

Cada vez que se quema algo al cocinarlo o se pega a la sartén vivo una respuesta fresca y renovada de frustración cuando en el fondo, lo pienso, y este es solo uno de los múltiples desastres cotidianos que se repiten en mi vida constantemente.